Cascadas de la Llama Eterna, Orchard Park, New York
Detrás de una pequeña cascada en la Reserva de Shale Creek en Chestnut Ridge Park de Nueva York, puedes apreciar lo que parece una ilusión óptica: Una brillante llamarada. La verdad, es que podrás olerla antes de verla, y sorprendentemente es real. Alimentada por lo que los geólogos afirman, una pequeña fuente de gas natural subterránea.
Una falla geológica en el lugar, permite la fuga de un kilogramo de gas metano al día. En algún punto a principios del siglo XX un visitante decidió encenderla. El agua a veces logra extinguirla pero siempre hay alguien cerca con un yesquero para reavivarla.