7. Su cerebro es más complejo que el de los perros
El cerebro de los gatos, a pesar de ser pequeño, posee unas 300 millones de neuronas, a diferencia de las 160 millones que posee el cerebro del perro. Además, posee un gran plegamiento superficial, asemejándose en un 90% al cerebro humano, lo cual dice mucho de su capacidad cognitiva, teniendo en cuenta que esta es la parte del cerebro que se relaciona con el procesamiento de información compleja.