2. Pide perdón si te has tropezado con alguien
Es una buena costumbre. Se requieren disculpas, no sólo por hacer honor a la cortesía. Incluso si estás seguro de que no es tu culpa, al tropezar, detente por un momento, pide perdón y sigue adelante.
¿Por qué es importante? No tienes ni idea de quién es aquel con quien tropiezas por la calle. La persona con quien te has tropezado puede llevar armas, haber consumido mucho alcohol o drogas. Puede sentirse muy enojado o molesto. Una simple disculpa puede ayudar a evitarte un grave peligro.