2. Confiados
- Un estudio en la universidad de Oxford encontró que una persona inteligente confía más en la gente. Esto es porque ellos saben juzgar el carácter de las personas y suelen formar relaciones con gente que, según su criterio, no los traicionaría. Otra buena razón es que es más fácil para estas personas calificar las situaciones y reconocer los incentivos para que la otra persona no cumpla con su parte del trato de la relación. También se demostró que la gente más confiada es más saludable.
3. Usan muchos insultos
- A veces se dice que las personas que dicen más insultos “limitan su vocabulario”. Pero si lo piensas a fondo, aquellos que no las usan son los que se están limitandolo. Intencionalmente están usando menos palabras que los otros y esto es falta de estimulación para tu cerebro. De hecho hay estudios que muestran que las personas que dijeron más malas palabras en un minuto tenían un coeficiente intelectual mayor.
