Es un potente antioxidante
Además de hidratarnos, el agua de coco, es capaz de frenar el efecto de los radicales libres en la piel, gracias a su contenido en Vitamina C.
En este sentido, otro estudio ha demostrado que las ratas con daño hepático son capaces de mejorar el estrés oxidativo si tomaban agua de coco.
Es un buen aliado contra la diabetes
Varios estudios con animales ( 8 , 9 , 10) han demostrado la eficacia del agua de coco como regulador de los niveles de azúcar e insulina. Sin embargo, faltan estudios en humanos. No obstante, su bajo contenido en azúcares permite que sea tomada por personas diabéticas.
También es una buena fuente de magnesio, que se ha demostrado que mejora la sensibilidad a la insulina y disminuye los niveles de azúcar en sangre en personas con diabetes tipo 2 y prediabetes (11 , 12 ).
Puede ayudar a prevenir los cálculos renales
Los cálculos renales se forman cuando el calcio, el oxalato y otros compuestos se combinan y cristalizan en las vías urinarias. El agua de coco reduce los niveles de oxalato y por tanto puede ser útil para prevenir la aparición de este problema.